Entrevista a Tania Santana
Tania Santana (Gran Canaria, 1987) es técnico en gestión administrativa y, actualmente, sigue ampliando su formación. Vive en un pueblo costero de Gran Canaria, a escasos metros de la playa, y es una apasionada de la literatura desde su infancia, en especial del thriller y la novela negra. Amante de los animales, al igual que Eliza, la joven protagonista de Las sombras del sótano. Con tan solo dos años le regalaron su primera colección de libros. A los cinco, ya poseía una máquina de escribir que, con el tiempo, usó para construir numerosos relatos. Su primera novela, Las sombras del sótano, un thriller de terror psicológico, dosifica la intriga con capítulos cortos que invitan a continuar sin parar de leer hasta el sorprendente final.
A los cinco años ya te regalaron una máquina de escribir. ¿Qué puedes contarnos de tus inicios en la escritura?
Recuerdo empezar por la ilusión de lo que suponía usar una máquina de escribir, más que por la escritura en sí. Una vez me aficioné a la lectura fue cuando empecé a interesarme por la escritura. A tener ganas de escribir y de contar lo que se me pasaba por la cabeza.
Relato corto o novela, ¿Qué prefieres? ¿Escribiste algún relato antes de tu primera novela, Las sombras del sótano?
Novela, sin duda. Y sí, escribí varios relatos, sobre todo en la adolescencia, las historias que se me ocurrían por aquel entonces no daban para una novela.
Thriller, novela policíaca, terror psicológico… ¿Cómo calificarías Las sombras del sótano?
Una mezcla entre thriller y novela negra. Thriller por el suspense y la intriga que genera, y novela negra por las escenas que relata el caníbal.
Sitúas la acción en Castle Combe, un pequeño pueblo famoso por ser uno de los más bonitos y tranquilos del sudoeste de Inglaterra. ¿Por qué lo elegiste? ¿Lo conoces personalmente?
Lo elegí a raíz de un artículo en el que te daban una lista de los pueblos más bonitos para visitar de toda Europa. Me gustaron las fotos que mostraban y también el nombre del pueblo. Así que cuando me puse a escribir la novela, me acordé de él.
Y no, no lo he visitado. Pero me encantaría, es más lo tengo como obligación después de haber escrito el libro.
Novela escrita en dos tramas que acabarán cruzándose en tiempo y lugar. Por un lado, la familia Baker compuesta de los padres y sus dos hijos: Eliza (18 años) y Luke (11) que viajan a Castle Combe para pasar las vacaciones navideñas de 2002. Por otro, un personaje desconocido confiesa al lector a través de un diario iniciado en los ochenta su “deseo irresistible” de comer carne humana. Ambas tramas se van alternando mientras crece la intriga. ¿Por qué dos tramas temporales? ¿Cómo se te ocurrió la idea?
Me gusta ese estilo. Diría sin lugar a dudas que es con el que más cómoda me siento escribiendo. Me gusta la narración a dos voces, y también la escritura en forma de diario, meterme en lo más profundo de la mente del personaje. ¿Qué hay más personal que un diario? Después de visualizar la historia, llegué a la conclusión de que para poder contar de manera detallada la historia del caníbal tenía que remontarme a los ochenta, a sus inicios. Su historia tenía que empezar mucho antes de que la familia Baker llegara a Castle Combe. Una vez ellos llegan al pueblo, es cuando empiezan los problemas, las cosas se tuercen llegando a entrelazarse ambas historias.
Eliza, una chica de dieciocho años es la protagonista principal de la novela. Nos cuenta la historia en primera persona y vivimos su evolución hacia la madurez a través de los sucesos ocurridos en ese tranquilo pueblo donde nunca había pasado nada. ¿Dirías que Las sombras del sótano es una novela para adolescentes?
No. No es una novela pensada ni escrita para adolescentes, aunque la protagonista lo sea. ¿Podrían leerla? Sí. Pero esta novela y lo que suelo escribir no va dirigido al público adolescente.
A través de Eliza, la novela reflexiona sobre el amor y el desamor, la obsesión que se confunde con el cariño, la manipulación del otro para satisfacer las propias necesidades. ¿Te has basado en las relaciones de pareja de nuestra época?
Básicamente sí. Todos conocemos casos a nuestro alrededor o los hemos vivido, de relaciones tóxicas, de amores posesivos y enfermizos. He intentado usarlo como reflexión de lo que está bien y lo que está mal.
La religión es otro de los temas que aborda Las sombras del sótano. ¿Nos acordamos de Dios cuando “tenemos el agua al cuello”, como dice Eliza? ¿Qué opinas de la religión? En tu opinión, ¿Cuál es o debería ser su papel en nuestra sociedad?
Creo firmemente que muchas personas nos acordamos de Dios. En este caso para mi es Dios, para otros puede ser algún santo o virgen, o algún tipo de energía. Pero si, tendemos a acordarnos y a pedir ayuda a lo “Divino” cuando nos vemos al borde del precipicio, ja, ja, ja.
Tengo sentimientos encontrados con respecto a la religión. Me he criado en un ambiente creyente, pero no practicante. Por un lado, mi parte racional piensa que la religión es un sistema creado por el ser humano para poder controlar a la sociedad. No comulgo con sus ideales. Una religión que te hace pensar que eres una mala persona, que has venido aquí a sufrir, que tienes que pedir perdón por el mero hecho de existir, que ningunea a la mujer, que condena la homosexualidad, que ha participado en lapidar personas o en enviarlas a la hoguera, etc… ¿Qué clase de Dios quiere todo eso? Por otro lado, soy de esas que se ha visto pidiendo ayuda cuando se ha visto con el agua al cuello. Incongruencias de la vida, pero una prueba por si acaso, ja, ja, ja.
Con respecto al papel que debería desempeñar en nuestra sociedad, abogo por un país laico y por la independencia de cualquier confesión religiosa. Que cada cual sea libre de elegir si quiere creer, y en qué. Eso sí, siempre que no me perjudique, ni coarte mis derechos ni los de ningún ciudadano.
El canibalismo o acto de comer carne de un miembro de la propia especie era práctica común entre las tribus indígenas del Nuevo Mundo cuando Cristóbal Colón desembarcó en la isla de Guanahaní. En Las sombras del sótano, el personaje desconocido que escribe un diario puede llegar a convertirse en caníbal. ¿Cómo se te ocurrió este personaje? ¿Te inspiraste en alguien real?
Se me ocurrió a raíz de una noticia que vi. Un chico había matado a su madre y la había descuartizado para posteriormente meterla en un tupper e írsela comiendo. Me impactó muchísimo esa historia. Me horrorizó la sangre fría que debe de tener esa persona para hacer semejante atrocidad. Luego me di cuenta de que no se habla demasiado en libros sobre este tema, aunque últimamente veo que lo tratan un poco más en películas y series. La historia se me quedó grabada pero no le di importancia hasta que tuve una época de malas lecturas. Libros en los que te quedabas con ganas de saber más acerca del “villano”. Sinopsis que prometían una cosa y luego eran todo lo contrario. Por lo que se me ocurrió usar la idea del caníbal. Darle voz a la víctima y al verdugo. Contar con detalles ambas partes. En definitiva, en un principio la idea no fue otra sino hacer el libro que a mi como lectora me gustaría leer.
Me documenté sobre varios casos de caníbales, vi entrevistas y documentales. Necesitaba saber ciertos detalles verídicos que contiene el libro, como son el sabor de la carne humana, cosa en la que coinciden la mayoría.
La importancia de contar con una familia feliz y unida está también muy presente en Las sombras del sótano. ¿Qué opinas del sacrificio de uno de sus miembros en aras de la “felicidad” del resto?
Que es fruto de una mente perturbada. De una persona egoísta y narcisista que lo único que busca es su felicidad a costa de la de los demás.
¿Tendrá continuación Las sombras del sótano?
En principio no. La idea al comenzar este libro era que fuera autoconclusivo. Pero varias personas me han comentado que les gustaría una segunda parte. Tendría que ver en el tiempo como funciona. Y si veo que a una gran mayoría de lectores les gustaría, podría planteármelo sin duda.
Tus cinco novelas recomendadas para fomentar la lectura entre las jóvenes generaciones son…
El diario de Ana Frank; Cometas en el cielo, de Khaled Hosseini; El tren de los huérfanos, de Christina Baker Kline; El niño con el pijama de rayas, de John Boyne; La verdad sobre el caso Harry Quebert, de Joël Dicker. Da igual lo que lean, pero que lean. Que busquen hasta dar con el género que más les guste.
Y tus consejos para empezar a escribir…
Leer mucho, es imprescindible.
Por último, tras la publicación de Las sombras del sótano, ¿Cuáles son tus próximos proyectos literarios?
En estos momentos tengo varias historias en mente sobre las que escribir, y ya estoy con una de ellas. La llevo un poco mas lenta que Las sombras del sótano, pero porque me encuentro inmersa en la promoción de esta y tengo menos tiempo. Está muy verde aún, pero es un thriller. Está narrado en primera persona a una sola voz. No tiene tintes de terror como las sombras, pero si intriga y suspense. Estoy valorando si presentarla a algún concurso literario. O quizá la termine y no me guste y empiece con otra, quien sabe. De momento me estoy centrando en disfrutar de mi primera novela, ya que para mi ha sido un logro poder verla publicada.
Desde Mucho Más Que Un Libro te deseamos mucha suerte.