¡Novela negra y adolescencia!
La novela negra, ¿está viviendo un “boom”? ¿Se la considera un género menor en círculos académicos? ¿Debería tener más presencia en los institutos? Y, por último ¿Qué tipo de lecturas negras “engancharían” a nuestros adolescentes?
Durante la última edición de la BCNegra, “Mucho más que un libro” buscó respuestas a estas preguntas entre diversos autores. Y si para algunos la novela negra está viviendo un “boom” relativo, en parte favorecido por la influencia del fenómeno Millennium, de Stieg Larsson, otros piensan que no existe tal “boom” porque “la novela negra ha existido siempre”. Incluso hay quien apunta que “a pesar de la buena salud del género, los tres últimos años de crisis económica han supuesto un retroceso general en las ventas de libros, en especial de los de lengua catalana “porque ya sabemos que cuando el castellano pilla un resfriado, el catalán sufre pulmonía”.
Sobre si se lo considera un género menor en círculos intelectuales y académicos, nuestros autores coinciden en que, injustamente, SÍ, porque “en general, la novela negra no tiene voluntad de aleccionar ni enseñar”, aunque “debería estar presente en la universidad, como sucede en Francia”. No obstante, también debemos asumir que “existen dos tipos de novelas: la buena y la mala. En todos los géneros hay obras buenas y malas y la literatura negrocriminal no es una excepción”.
En cuanto a fomentar la lectura de novela negra y policíaca entre los adolescentes, nuestros autores opinan que este tipo de relatos “atraen y divierten a los jóvenes” y que la lectura de novela negra de calidad debería introducirse en los planes de estudios de la ESO, porque “si no les facilitamos historias con las que se puedan divertir perdemos un lector para siempre”. No obstante, “tampoco podemos olvidarnos de obras maestras de la literatura como La isla del tesoro, de RL. Stevenson, que todo alumno debería haber leído al finalizar los estudios obligatorios”.
Y, ¿qué hacer para que nuestros jóvenes se conviertan en saludables “adictos” al placer de la lectura? Nuestros autores opinan que abundan los títulos para conseguirlo, empezando por El halcón maltés, de Dashiell Hammett, Un negre amb un saxo, de Ferran Torrent, Escupiré sobre vuestras tumbas, de Boris Vian y Prótesis, de Andreu Martín, sin olvidar a los clásicos como Edgar Allan Poe, considerado el padre de la novela policíaca con su Los crímenes de la Rue Morge, Agatha Christie y su Hércules Poirot, Arthur Conan Doyle y Sherlock Holmes, el detective adolescente Flanagan, de Andreu Martín y todos los casos del comisario Salvo Montalbano, nacido de la pluma de Andrea Camilleri, IX Premio Pepe Carvalho de Novela Negra, entre otros muchos.
Y, lo más importante, “que nuestro adolescente se sienta identificado con los personajes protagonistas de sus lecturas negras”.
¡No olvidemos que el futuro de la novela negra y policíaca está en sus manos!