¡Dos días en #6VLCNEGRA!
Cerca de 11.000 espectadores en 10 días, del 4 al 13 de mayo, repletos de encuentros, charlas sobre libros, cine, fotografía, teatro, premios, gastronomía, Masterclass de cine y narrativa, exposiciones, clubs de lectura… VLCNegra se reinventa y crece año tras año para disfrute de autores y lectores incondicionales del género negrocriminal. Y, entre ellos, Mucho Más Que Un Libro, que volvió a disfrutar de un fin de semana negro e inolvidable.
El viernes 11 de mayo a las 18 h. en un marco incomparable por su belleza –la sala Alfons El Magnànim del Centre Cultural La Beneficencia- descubrimos que el mundo rural puede resultar tan o más negro literariamente hablando que la ciudad, territorio natural del género. Así en Country Noir, Enrique Llamas (Los Caín), Paco Bescós (El porqué del color rojo) y Luis Roso (Primavera Cruel) presentados por Jessica Crespo coincidieron en que en sus novelas trabajan con lo que es verosímil, aunque Llamas confesó que “lo más inverosímil que se cuenta en la novela es real y lo que me invento no ha ocurrido, pero es verosímil”.
“Hacer que los muertos del pasado se paseen por el presente de los vivos” es uno de los objetivos de “Fuera de la ley: Anarquistas y pistoleros”, una obra única de artículos y ensayos publicada por La Felguera Editores. El libro, presentado por Servando Rocha, nos adentra de forma magistral en la historia de los bajos fondos con pistoleros, anarquistas, “bandas negras”, “apaches” y policías que pueblan la España del subsuelo de 1900 a 1923. “El pasado es presente y siempre acaba regresando”, opinó Rocha, quien también se declaró admirador del gran escritor Pio Baroja, “el primero que dignificó el golferío en sus novelas”, y añadió que, a principios del siglo XX, los “bajos fondos” recibían el nombre de “barrios tenebrosos” y que se creía que “por los rasgos físicos se podía determinar el llamado instinto criminal”. ¡Apasionante disertación!
La tarde finalizó con las Nuevas escenas del crimen que nos trajeron Jerónimo Tristante (Nunca es tarde), Carlos Augusto Casas (Ya no quedan junglas adonde regresar) y Laura Gomara (Vienen mal dadas) presentados por Ramón Palomar. Todos coincidieron en que el género negro es perfecto para entretener al público y hacer crítica social y nos descubrieron el porqué de sus novelas. A Jerónimo Tristante le encantaría “viajar en el tiempo y por eso pongo a Víctor Ros en el Madrid del siglo XIX” y mata literariamente casi sin darse cuenta, mientras que Laura Gomara ha escrito una novela desde el punto de vista de los criminales y “cada vez mato más” y Carlos Augusto Casas desveló la atracción que ejerce la parte oscura sobre cada uno de nosotros, “El Caso, por ejemplo, fue un fenómeno periodístico. Llegó a tener un millón de lectores”, apuntó.
Y llegó la mañana del sábado 12, con una cita con Nuestro lado oscuro en el FNAC San Agustín. Nos esperaban Pasqual Alapont, Marc Moreno y Ariadna Herrero, presentados por Ernest Parra. Pasqual Alapont, un autor que escribe habitualmente para el público infantil-juvenil debutó en la novela para adultos con El mal que m’habita, una historia en la que el lector descubre que “todos mantenemos ocultos secretos aberrantes”, aunque Alapont opinó que “la literatura es una vacuna. Inocular una pequeña porción del mal nos sirve para enfrentarnos mejor a los problemas”. Marc Moreno, por su parte, nos habla en Temps de rates “de cómo el entorno puede condicionar tu vida, de cómo los chicos que crecen con referentes equivocados (delincuencia, drogas, familias desestructuradas…) no ven más futuro que la delincuencia como única vía de salida” y Ariadna Herrero se adentró en el peligroso mundo de las sectas en Seràs un dels nostres. “Guillem, el protagonista, se infiltra en una secta en un descenso voluntario a los infiernos para averiguar que le ha pasado a su amada, que ha desaparecido. Quería hablar de las sectas porque encuentro bastante desconcertante que se pueda manipular a una persona hasta hacer desaparecer su personalidad y sustituirla por otra”, explicó Herrero.
Llegó el momento de explorar Las malas calles con Joan Canela y Jordi Colonques, autores de Napalm, Paco Gómez Escribano (Lo que gritan los muertos) y Susana Hernández (Males decisions), presentados por Carmen Velasco. Para Susana Hernández esta es su primera novela escrita en catalán tras la serie dedicada a las subinspectoras Santana y Vázquez. La acción de Males decisions se sitúa en un pueblo “de postal” y cuenta la historia de una familia aparentemente normal, pero el secuestro de un niño, hijo de una de las parejas, “destapará un montón de basura”. Por el contrario, Lo que gritan los muertos, de Paco Gómez Escribano, sí ocurre en el barrio de una gran ciudad, el del propio autor que quiere mostrar en sus novelas “la cara B de mi barrio en diferentes épocas. Hago lo que llamaríamos realismo sucio, crítica social con ficción”, explicó. En Napalm, los autores escriben sobre “personajes marginales en una historia surrealista que se lee bien, aunque es poco creíble”, explicaron.
Un merecido descanso de tanto crimen, decisiones equivocadas y marginalidad nos esperaba tras deambular por las Malas calles para volver con ánimos renovados a las sesiones de la tarde en la Sala Russafa. Jazz en directo para dar la bienvenida a autores y lectores y sin más preámbulo nos sumergimos en la Corrupción, abusos y otras podredumbres que nos ahogan de la mano de Inés Plana (Morir no es lo que más duele), María Frisa (Cuídate de mí) y Jordi Juan (Cenicienta en llamas). Presentados por Joan Carles Martí, todos coincidieron en que “la víctima siempre tiene culpa emocional que no debería tener” y consideraron Crematorio, basada en la novela homónima de Rafael Chirbes, la gran serie española que denuncia lo ocurrido durante los años del “ladrillo”.
“La libertad de expresión es la primera libertad y detrás vienen todas las demás”, proclamaron el autor canario Alexis Ravelo y el prolífico escritor catalán Andreu Martín. Ambos nos hablaron de su obra y de sus últimas creaciones literarias. Martín ha publicado El Harén del Tibidabo, una novela negra en la que el histriónico protagonista, Mili Santamarta, descubre que su madre no lo abandonó hace diez años, sino que fue asesinada. “Suena raro que un protagonista de novela negra siempre esté hablando de su mama, pero tenía que ser así”, explico el autor. Por su parte, Ravelo confesó que escribe una novela de la saga de Eladio Monroy “cuando estoy cabreado con alguien”. La última de la serie, El peor de los tiempos, es también “un homenaje a las mujeres que nunca tuvieron una oportunidad en su vida”. Ambos autores reivindicaron la figura de Benito Pérez Galdós como escritor de referencia y coincidieron en que “al escribir una novela descargamos la rabia e igual empezamos a entender cosas”.
No todo es blanco o negro, en la vida y en la literatura abundan las diferentes tonalidades de grises y de ello nos hablaron dos grandes escritores: Carlos Zanón (Taxi) y Víctor del Árbol (Por encima de la lluvia) que reivindicaron que los escritores de novela negra no tienen por qué tener “problemas de identidad o de encaje con el mundo” como alguna gente cree. La música y la poesía están siempre presentes en las novelas de Zanón porque la “literatura está llena de musicalidad”, mientras del Árbol escribe “para reordenar mi vida, pero no como terapia”. Y, entre otras confidencias que nos ayudan a conocerlos mejor destacaron la importancia del título de la novela. Siempre lo ponen antes de empezar a escribir, como una pauta imprescindible.
Tras una tarde perfecta, llegó la esperada entrega de Premios elegidos por votación popular entre cinco novelas finalistas. Leonardo Padura y La transparencia del tiempo ganaron el Best Novel VLC Negra 2018, mientras Napalm, de Joan Canela y Jordi Colonques, fue elegida Millor Novel·la VLC Negra 2018 y Por encima de la lluvia, de Víctor del Árbol, fue galardonada con el Premio a la Mejor Novela VLC Negra 2018.
Faltaba un último acto Pata Negra para despedir con todos los honores esta #6vlcnegra. Jamón, vino y firmas de libros reunió a autores y lectores el domingo 13 de mayo en la Casa del Libro de Valencia. ¡Nuestras felicitaciones a la excelente organización de este espléndido festival y hasta la VLCNegra 2019!