¡”El bosque de los inocentes” en l’Obrador!
Nuevamente, el miércoles 18 de mayo, L’Obrador d’històries abrió sus puertas a la jueza y escritora Graziella Moreno, que presentó su segunda novela, El bosque de los inocentes, en este espacio abierto a todos los amantes de la literatura. Pero, en esta ocasión, a diferencia de Juegos de Maldad (2015), su opera prima, el lector no viaja a los juzgados de instrucción, sino a los tenebrosos bosques que rodean el pueblo ficticio de Rocablanca, con sus misterios ocultos y sus leyendas sobre brujas.
Unos niños desaparecidos y la posterior búsqueda contrarreloj en los bosques del Montseny, un asesino que actúa como el psicópata Gilles de Rais, noble francés del siglo XV, contemporáneo de Juana de Arco y considerado uno de los peores criminales de la Edad Media, una joven abogada que cada noche sueña pesadillas, secretos de familia y leyendas de brujas, esperan al lector en esta novela que añade el atractivo de lo sobrenatural a la investigación policial. Graziella Moreno nos presenta una trama trepidante con elementos “mágicos” como telón de fondo. “Me atrae mucho el tema –confesó- y quería hablar de las leyendas sobre las brujas que habitan los bosques, que curiosamente nunca son buenas. Ya se sabe que en el imaginario colectivo, desde lo de Adán, la mujer siempre es la mala”, bromeó la autora.
Graziella Moreno Graupera debutó en la literatura a principios de 2015 con Juegos de Maldad, una novela policial y judicial ambientada en los juzgados. Tuvo muy buena acogida y se presentó en los principales festivales de novela negra del país. Deseosa de seguir contando historias, la autora ha publicado recientemente El bosque de los inocentes, un relato más fantástico y personal “que no se inspira en nadie en particular”. La novela ha transitado ya por diversos festivales y estará presente en la próxima edición de la prestigiosa Semana Negra de Gijón.
Y, para terminar esta sugestiva charla sobre misterios, brujas y fenómenos inexplicables, nada mejor que un delicioso piscolabis con brindis incluido por El bosque de los inocentes y las “dones d’aigua” que se ocultan en su espesura.
¡Atrévete a pasear por El bosque de los inocentes! ¡No te arrepentirás!